Tres "pringaos" acostumbrados a "chupar banquillo" en los partidos de béisbol de su infancia reciben una segunda oportunidad años después. Por el hecho de rescatar a un chico de las intimidaciones de un grupo de matones, el padre de éste les ofrece jugar un torneo de béisbol contra jóvenes jugadores de primaria. Él les pagará el viaje y financiará todos los partidos con la finalidad de vengarse de los gamberros que se meten constantemente con su hijo. Como premio, al equipo ganador le construirá el estadio más grande del mundo. Los entrenamientos para los partidos correrán a cargo de la leyenda del béisbol Reggie Jackson, quien aplica varias técnicas para preparar a los tres "calientabanquillos". Los protagonistas son tres cómicos muy conocidos en Estados Unidos, sobre todo los dos primero: David Spade (Dicky Roberts: Ex niño prodigio), Rob Schneider (Deuce Bigalow: European Gigolo) y Jon Heder (Napoleon Dynamite). Ellos son los tres "perdedores" que tienen la suerte de jugar por fin un partido de béisbol y no quedarse con las ganas de salir al campo. Por su parte, Dennis Dugan (Seguridad nacional) dirige la película consolidándose como una de las figuras más destacadas de la comedia de su país. "Este chico es un demonio", "La salchicha peleona" o "Un papá genial" son algunos de los trabajos más conocidos en los que Dugan suele repetir su fórmula cinematográfica siempre basada en el humor.